Tras meses de retraso, ya que esta entrada tenía que haber sido la última antes del verano y va a ser la penúltima del año, voy a hablar de The Witcher y su temporada 3. Llego tarde, lo sé, pero he tenido cosas más importantes que hacer, como migrar el blog y superar noticias agridulces. Pero como dicen por ahí, nunca es tarde si la dicha es buena, así que allá vamos con nuestra crítica gutural sobre esta serie de Netflix y los últimos momentos televisivos de Henry Cavill como Geralt de Rivia.
Si nos ceñimos a lo que hemos visto en esta tercera temporada y nos abstraemos de todo lo demás, es una serie que va de más a menos. Con un final bastante decepcionante y unas tramas de lo más insustanciales, sin fondo. Es decir, que todo lo que hayáis oído malo de The Witcher y su temporada 3 es cierto, pero solo en la parte final (sus dos últimos capítulos, sobre todo). Es una lástima, porque la serie empieza bien, como acabó la segunda temporada. Sin embargo, se va diluyendo como un azucarillo con el paso del tiempo. También saber de antemano que Henry Cavill deja la serie es un jarro de agua fría para casi todos los seguidores de esta producción.
The Witcher Temporada 3 no ha sido bien acogida por los seguidores de la serie
Al hilo de esto, empezamos con todo lo que rodea al trabajo del equipo de The Witcher: las críticas. Según algunas fuentes, solo el 22 % de los seguidores le han dado una valoración positiva. Es curioso porque en Rotten Tomatoes, una página donde la peña no se corta poniendo a caldo series y películas, su puntuación para The Witcher temporada 3 es de 79 %, 11 puntos por encima de la primera temporada y 16 puntos por debajo de la segunda, pero la puntuación de la audiencia, que se ve en el audience score, es de solo un 19 % (con lo que es menor que lo que dicen). No es lo mismo que los críticos te puntúen bien (un 79 % lo hace), que solo un 19 % de la audiencia lo haga.
Por esta razón, Netflix ha congelado la cuarta temporada y el estreno de Liam Hemsworth como Geralt de Rivia, lo que no es una buena noticia. Ya os contamos en este mismo blog que este aspecto no había sentado nada bien a los seguidores. Además, para echar más leña al fuego, su productor ejecutivo, Tomek Baginski, culpa directamente a los espectadores americanos, a TikTok y YouTube de las malas críticas. Estas dos plataformas son la cuna de todo el mal de universo y sorben el seso a los pobres habitantes de Estados Unidos.
Las justificaciones de Tomek Baginski, productor ejecutivo de The Witcher sobre la temporada 3 son de risa
Simplemente, como ellos solo se miran en ombligo y su público son ellos, las tramas de los libros «para los norteamericanos no eran comprensibles, eran demasiado complicadas, porque han crecido en un contexto histórico diferente donde todo estaba preparado. Los Estados Unidos siempre son los buenos, el resto son los malos. No hay complicaciones». No contento con este comentario, acabó con esta declaración: «Cuando se hace una serie para una gran masa de espectadores, con diferentes experiencias, de distintas partes del mundo y una buena parte de ellos son norteamericanos, estas simplificaciones no solo tienen sentido, sino que son necesarias. Es doloroso para nosotros, para mí también». Vamos, que los estadounidenses son idiotas y por eso hay que ponerles las cositas mascaditas, que les explota el cerebro.
No hace mucho, Andre Sapkowski, fue como invitado a la ComicCom de Viena y habló sobre Netflix y de The Witcher temporada 3. Allí dijo que nunca le han pedido su opinión sobre la serie (y eso que es el padre de la criatura). Que él les había dado ideas y nunca lo escucharon, no se le tuvo en cuenta (algo idéntico a lo que hizo Disney con George Lucas para Star Wars). Terminó diciendo que no le extrañaba, ya que en Netflix no le tendrían en cuenta. Cualquier ejecutivo de la empresa hubiera preguntado: ¿Quién es este tipo? Es el escritor. Entonces, no es nadie. Y este es el panorama actual. Con estos mimbres, lo raro es que haya aguantado tres temporadas.
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Para terminar, podemos concluir que ha sido Henry Cavill quien ha intentado, sin éxito, controlar los derroteros de The Witcher. El actor ha dicho en numerosas ocasiones que siente admiración y un profundo respeto al trabajo de Andre Sapkowski, por eso aceptó el papel, pero bajo unas condiciones, que no se cumplieron en esta tercera temporada. Ni, por puesto, en las dos que ya tiene apalabradas y que ahora están en el aire.
Cavill se comprometió a siete temporadas de The Witcher y solo hizo tres. Liam Hemsworth tiene dos para demostrar a los fans de la serie que es tan bueno como Henry, pero dudo que le dejen, porque Netflix cancelará The Witcher. Espero equivocarme, pero algo huele a podrido en casa de esta plataforma de streaming.
