Vamos con una nueva crítica sobre otro estreno del universo Marvel, Venom (7 en IMDB; 5,7 en filmaffinity). A pesar de todo lo que había sido publicado sobre ella desde que empezó su proyección en cines, me decidí a verla para comprobar, en mis propias carnes, lo lamentable de esta cinta y, la verdad, es que no iban mal encaminadas. Lo único que salva a la película es la actuación de su protagonista, Tom Hardy, porque todo lo demás es despreciable. Digamos que es fiel a su género, en el sentido más retorcido de la frase, como debía haber sido el protagonista, ya que solo es divertida y entretenida, pero abusando de los tópicos que Marvel ha creado y exprimido hasta la saciedad.
Lo que debería haber sido una cinta oscura, digna de un antihéroe, no lo es y esos claroscuros los consigue gracias a estar grabada por la noche. En definitiva, tú vas a ver algo que debería haber sido no apto para niños (así era la idea original) y acabas viendo una mala imitación del estilo Deadpool, un quiero y no puedo u otra gran mentira de Marvel y su máquina de publicidad engañosa.
Venom es entretenida e, incluso, divertida, pero no es el personaje oscuro de los cómics
Sí, porque este Venom no es, ni por asomo, el de los comics. No es anti nada, ya que es justo lo contrario de lo que presume, un héroe bonachón, aunque lo intenten camuflar comiéndose a la gente, no solo a los malos. ¡Uf, qué crueldad desmedida!, aunque al final, solo se merienda villanos. Si contamos, además, que abusa de la broma fácil y del histerismo, pues nos queda una película que, si te pones exigente, te resulta una enorme mierda, pero si vas, como fui yo, a ver qué pasa, te entretiene lo justito.
Vuelvo a resaltar lo único destacable de la película, su protagonista, que está mucho mejor en la primera media hora, que en el resto del metraje. Esto coincide cuando es más Eddie Brock que simbionte, ya que luego pasa por un estado de jocosa esquizofrenia exagerada, para convertirse en cuasi una copia del hombre araña. Poco más. El resto de personajes que lo acompañan cumplen como mera comparsa, para dar cierto tipo de toques emotivos cuando Disney considera que son necesarios, porque Sony se ha dejado influenciar en demasía por su socia en este proyecto. Incluso ese cierto toque ochentero sobra, sobre todo por el lenguaje del simbionte, que no sé si será demérito del doblaje o del guion.
La prueba gráfica de que fui al cine a verla: la foto, oscura, del cartel justo antes de entrar a la sala
Acabo no recomendando esta película a los fans de los tebeos, porque os va a defraudar mucho, y a todos los demás, no esperéis nada más que entretenimiento básico, sin más. Aunque viendo cómo va en la taquilla, es posible que lo único que reporte sea unos pingües beneficios. Por cierto, si sois como yo y os gusta ver las escenas post-créditos, no os quedéis a la segunda, ya que es un tráiler de la cinta de animación de Spider-Man, que es el único punto de unión que tiene con este superhéroe. Vais a perder vuestro tiempo y son casi diez minutos de espera. Para que luego os quejéis de que os trato mal. He destripado lo justito.